6.- De horquillas y otras gotas.

Aunque había tomado el baño con intención de relajarse, se sentía inquieta. Sus neuronas estaban hiperactivas, tratando de relacionar los hechos para que saltara la chispa y todo tuviera sentido. Pero no lo conseguía, y se quedaba en una serie de hechos extraños y una buena dosis de intuición.

Cualquiera habría calificado sus ideas de imaginación o fantasías, pero Félix no. Conocía a Amanda desde hacía tiempo, y la experiencia le decía que ella solía tener razón en ese tipo de cosas. Estaba muy ocupado con un caso de robos en un polígono industrial, y prefirió que ella se encargara de eso. Era la primera vez que investigaban algo sin tener un cliente. O, según parecía, ellos eran sus propios clientes.

Con el secador en la mano, Amanda trató de relajarse. Decidió darse un tiempo para reposar las ideas y no volver a pensar en ello hasta el día siguiente. Entonces, mientras se peinaba, algo brilló en su pelo. Era una horquilla de las que se acababa de poner, una simple horquilla había logrado que olvidara de golpe la política, la seguridad informática, a Félix y la supuesta infidelidad. Su rostro se ensombreció y sus facciones denotaron los músculos en tensión. Tristeza y rabia compitieron entre sí y la contienda concluyó en empate.

Volvió a su habitación con la horquilla en la mano, y se quedó mirando la cama, sin saber muy bien qué hacer. Esa horquilla era rubia, y ella era morena. Sólo podía haber llegado a su lavabo de una manera. Y era la gota que colmaba el vaso.

Una lágrima rodó por cada mejilla mientras se vestía, lágrimas de las que se avergonzaba, pues no quería sufrir más por una situación que no estaba dispuesta a seguir soportando. Pagó una habitación de hotel, pues la sola idea de volver a dormir en aquella cama le daba náuseas. Cenó un bocadillo y trató en vano de conciliar el sueño. Al darse cuenta, decidió dar un paseo.

Pensarlo no serviría de nada. No iba a conseguir consuelo, y la única solución era la que ya había decidido. Se obligó a concentrarse en su trabajo, y dirigió sus pasos hacia el bar donde había encontrado por casualidad a Alberto, o Carlos, o como se llamara. Pidió un gin-tonic y se sentó. Para ser lunes, había bastantes personas. Varias parejas, algunos bailando…

Esa copa no fue la única. Odiaba beber en esas circunstancias. Amanda disfrutaba de la bebida en compañía, siendo para ella un catalizador de la alegría. Pero alguien triste que bebe se hunde aún más.

Entonces llegaron. Era, sin duda, el presunto infiel, con la chica que parecía ser su pareja la última vez que lo vio, en aquel bar, con otra pareja de amigos. Estaban solos, y pidieron dos cañas de cerveza. Por cómo les habló el camarero, Amanda supuso que los conocía. Era probable que frecuentaran aquel lugar. Encontrarlos dos veces allí era mucha casualidad.

Esperó paciente a que terminaran, lo que supuso una media hora, y luego los siguió. Entraron en un portal cercano y tomaron el ascensor. Amanda sujetó la puerta antes de que se cerrara, y así pudo ver a qué planta subieron. Tomó nota de la dirección, y de los nombres de los buzones. Uno de ellos era «Carlos». En la planta había tres pisos. Aguardó un buen rato, para ver si alguno de los dos volvía a salir, pero no fue así. Salió a la calle, y buscó con la vista las ventanas correspondientes a esa planta. Era tarde, y todas las luces estaban apagadas. Volvió al hotel.

Se conectó a Internet y buscó los nombres que había visto en los buzones, empezando, por supuesto, por Carlos. Su corazón se aceleró al ver fotografías del chico. Era una página promocional, Carlos era actor, y mostraba su curriculum con todos los papeles que había realizado. Alguna obra de teatro, algún anuncio para televisión, protagonista en dos cortos y actor de reparto en varias películas. Incluía el enlace de varias productoras.

Amanda rastreó, paciente, todos esos enlaces, y en uno de ellos encontró a la presunta amante de Carlos (pues ya estaba segura de que no se llamaba Alberto), y a la persona que les había encargado la investigación, su supuesta y nada afligida esposa. Todos eran actores, y coincidían en aquella productora, por lo que supuso que alguien los había contratado para engañarla a ella misma y a su jefe. Amanda no podía imaginar quién ni por qué.

Aunque ya era tarde, el sueño le estaba negado aquella noche, así que escribió un informe con todo lo que había descubierto, con las direcciones, fotos de los actores y demás, y se lo envió a Félix para que estuviera al tanto. Como de costumbre, tuvo la precaución de guardar una copia de seguridad en su bolso.

Casi amanecía cuando su teléfono comenzó a sonar. No era el despertador. Consultó la pantalla: Su marido. Rechazó la llamada y desconectó el aparato. Por la tarde trataría de hablar con su abogado.

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Acerca de Alan Rulf

Alan Rulf es el pseudónimo que recoge mi faceta de escritor, para separarla de otros intereses y aficiones.
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22 respuestas a 6.- De horquillas y otras gotas.

  1. Azo dijo:

    Jolin… Debe sentirse francamente mal..Por todo..
    Hizo bien en rechazar la llamada del marido, Que valiente!!

  2. lehahiah0909 dijo:

    Osi ….me vas a perdonar pero ando sin tiempo y muy agobiada queriendo pasar por todos los rincones a veros …a deciros a decirte que no te olvido…que te llevo aunque no me veas..pero hasta que no quitemos el árbolito de navidad y los Magos se vayan…a mi no me sueltan…
    Un abrazo…pásalo genial el 31…muakkkkkk

  3. morgana43 dijo:

    Ya voy “pillando”… mi neurona es lenta o esta de vacaciones… anda que no es torpe (también) el de la horquilla, de todas formas le queda camino que recorrer a la pobre, en todos los frentes; desde el cariño, no desde la lastima, me da que es corajuda Amanda
    Saludos

  4. Me parece que cada vez se pone mejor y más interesante, me gusta mucho la trama. Creo que así es la vida real, compleja tanto a nivel laboral como personal. Aunque es difícil combinar las dos facetas, Amanda, las maneja muy bien.

  5. bypils dijo:

    Pobre Amanda…Puestos a complicar, ya lo complicamos todo… ; – )
    Y menos mal que ha hecho esa copia de seguridad.
    Saludos y Abrazos ( hoy, las dos cosas.)

  6. gOtaSmaR dijo:

    queda triste… en esos momentos el sentir de amanda me lo ha trasmitido a mi….

    uffff

  7. aslaram dijo:

    Buenos dias.
    Pobre Amanda, pero inteligente si que es, vamos, y caracter a raudales.
    Feliz año y buen fin de semana.
    Saludos

  8. Amanda es una mujer despierta y con mucha garra, pero en sus relaciones matrimoniales andaba despistadilla. La horquilla la ha despertado del todo.
    Un fuerte abrazo y Feliz Año Nuevo.
    Mercedes

  9. Vaya, esto se está enrredando… actores???? como que todo está relacionado…

  10. Ana Azul dijo:

    Lo mismo esta juzgando mal al marido. Una horquilla no significa nada, aunque cualquiera sabe. La cosa se complica con Carlos y su amiga…
    Besitos y feliz año
    Ana

  11. Susana dijo:

    Qué interesante. Un beso.

  12. Emy Tecuento dijo:

    ¡Dios mío, Alan!, cuanto retraso llevo con vuestras entradas por culpa de mi PC que me ha dejado tirada tanto tiempo!! Espero que todo vuelva a la normalidad despues de las fiestas y vuelva a coger el ritmo!!

    Voy de carrerilla para dejaros mi felicitación esta noche, por si mañana no pudiese asomarme.

    Volveré a ponerme al día en cuanto pueda 😉

  13. FELIZ AÑO 2012 , QUE VENGA CARGADO DE BENDICIONES , SALUD Y DICHA..
    DESDE MEXICO UN FUERTE ABRAZO….

  14. Querido Alan:
    Deseo que el año nuevo este lleno de oportunidades para ti, que tus sueños se hagan realidad y que la felicidad te acompañe en el camino.
    FELIZ AÑO 2012.
    Un fuerte y cariñoso abrazo
    Mercedes

  15. bypils dijo:

    Vuelvo a entrar a los comentarios, para desearte una buena entrada de año y de todos los que siguen. No sé si los osos comen uvas, pero , sea lo que sea- ¿doce arenques?- que esta noche sea fenomenal.
    Saludos. ; – )

  16. morgana43 dijo:

    Doce y cuarto… una uvita fue por este sitio tan guapo ¿vamos de cotillón? Nos vemos por ahí
    Feliz año

  17. veritasetprobitas dijo:

    Hola, Writer!
    Hacia tiempo que quería pasarme por aquí, pero últimamente no tengo tiempo ni para postear yo. Y cuando lo hago, voy a toda pastilla sin disfrutar todo lo que me gustaría…
    Espero ser más regular en este nuevo año, el cual aprovecho para felicitarte, y desearte que alcances todas las metas que te propongas 😉

  18. La mente de Amanda no descansa y a veces esto es mejor, cuando no se le quiere dar espacio a otros pensamientos indeseables o cuando se quiere descansar de ellos.
    ¡Feliz inicio de año!

  19. zambullida dijo:

    La horquilla puede delatar una infidelidad o tal vez no. Nunca se sabe. Feliz 2012.

  20. gaviotasinamor dijo:

    FELIZ AÑO NUEVO ALAN!
    AMANDA ES UNA MUJER MUY INTELIGENTE Y SALDRÁ AIROSA DE TODO ESTO,
    QUIZÁS LA HORQUILLA SEA SUYA, NO DEBERIA BUSCAR UN ABOGADO SIN HABLAR
    ANTES CON SU AMRIDO!
    SALUDOS ESCUETOS

  21. Emy Tecuento dijo:

    También me parecería precipitado, el consultar con su abogado por el tema de la horquilla… pero está claro que ya no merece la pena luchar por salvar ese matrimonio.

    La trama de lo profesional está de muerte!!!

  22. mensnudum dijo:

    Necesito decir que me fascina mucho esta historia. La mezcla es perfecta, Alan.
    Estos últimos post los leo muy tarde porque entre peques de vacaciones y fiestas varias…aunque como hoy toca guardia estoy dispuesta a ponerme al día. 🙂

    Saludos,

Los comentarios están cerrados.