Carolina permaneció en silencio un instante que no pasó desapercibido para Amanda. Luego trató de que no se le entrecortara la voz.
— ¿Qué quieres decir con eso de que te estaba gustando demasiado?
Hace muchos años ambas discutieron por un chico. Les gustaba, y su amistad se transformó en rivalidad. Se enfrentaron, dispuestas a todo por conseguirlo. Hubo otras también interesadas que desistieron al ver lo solicitado que estaba. Usaron sus mejores armas: Conversación inteligente, caída de ojos, sonrisas perdidas, escotes pronunciados, minifaldas atrevidas en pleno invierno, encuentros pretendidamente casuales, indirectas de terceras personas, tejemanejes varios… Él parecía todo lo que una chica de esa edad podía desear; era educado, sensible, agradable, divertido, de buena familia, estudioso… Además, les hacía caso. Sí, las escuchaba, y ambas estaban muy a gusto con él.
Carolina y Amanda tuvieron una fuerte discusión, y decidieron acabar con aquello de una vez por todas. Fueron a casa del chico y llamaron al timbre. Abrió la puerta, vestido sólo con su ropa interior. Ellas entraron, decididas, sin importarles su escasa vestimenta, hasta que descubrieron en su dormitorio a otro chico, tratando de taparse con las sábanas de la cama.
Tras la ceremonia de reconciliación, como les gustó llamarlo aunque en el fondo nunca se distanciaron, Amanda y Carolina decidieron que era un completo imbécil, y que nunca más discutirían por un chico. Era de lo poco que recordaban al día siguiente, tras la resaca que siguió a la borrachera.
Habían pasado muchos años de aquello. Tantos como ellas tenían cuando ocurrió. Ya no eran adolescentes, y la escala de prioridades podía haberse modificado. Las circunstancias eran distintas, y también las personas. Todos cambiamos, y hay momentos en que nos parece que la vida pasa demasiado rápido y tenemos que aprovechar lo que nos queda a toda costa. Y ambas se sentían en esa etapa de la vida en la que no sabes si mirar hacia atrás o hacia adelante. Amanda era su amiga, y conocía sus puntos débiles, pero otro enfrentamiento entre ellas era lo último que querría. Francisco le gustaba mucho, y congeniaban muy bien, pero había millones de chicos en el mundo.
Carolina lo tenía muy claro: Amanda podía irse buscando otro.
Y esperaba que fuera ella misma quien lo dijera, en un tiempo que a Carolina le pareció interminable, tras su pregunta acerca del «demasiado».
— Pues eso exactamente, que me estaba gustando demasiado.
— No te entiendo. Alguien te puede gustar mucho, pero… ¿demasiado? No tiene sentido. Cuanto más te guste alguien, mejor será, ¿no?
— Pues no. Yo acabo de divorciarme, y lo último que deseo es meterme en una relación seria y duradera, que me haga perder la independencia recién recuperada. Está muy bien conocer gente los fines de semana, pero Francisco no es lo que yo busco. Y a ti te gusta, no lo niegues.
— No, no lo niego. ¿Pero qué hay de aquello que decías de «Si a ti te gusta, pues a por él, y lo demás no importa»?
— No lo saques de contexto…
— ¿Que no lo saque…? ¡Pero si ése es precisamente el contexto! Me estás demostrando que en realidad las cosas no son tan sencillas, y que hay muchas más cosas a tener en cuenta. ¿Te puedo hacer una pregunta?
— ¿Puedo elegir?
— Si Francisco no me gustara, ¿pensarías igual?
— Carol, no digas más bobadas. Y ahora, ya que no me has dejado dormir, al menos déjame desayunar. Mi estómago lo reclama con urgencia…
— Bueno, no contestes si no quieres, pero dime una cosa: El día que quedaste con Francisco, ¿cuántas veces lo llamó su ex al móvil?
— ¿Al móvil? Ninguna. No tuvo ninguna llamada. Lo tenía encendido, porque recuerdo que miraba la hora en él, pero no sonó ni una sola vez. ¿Por?
— Por nada, cosas mías… Que aproveche el desayuno…
Carolina se sentía una tonta. Se arrepentía de haber planteado a Francisco de una forma tan tajante lo que pensaba. Creyó que le venía bien un tiempo para averiguar si las pegas que veía en su relación eran superables, pero no esperaba la respuesta recibida, y ante esa reacción prefería arriesgarse e intentar una relación, dispuesta a vencer todos los contratiempos que les pudieran surgir en el camino. Lo tuvo claro al recibir la respuesta de Francisco, y los últimos acontecimientos no habían hecho sino reforzar la idea.
La cuestión era qué pensaría Francisco de todo aquello. Y sólo había una forma de averiguarlo.
Sabes muy bien en qué punto terminar la entrada. Los puntos de inflexion me dejan en punta, a la espera del proximo. Que bien conoces el género femanino!
En este punto me desorienté un poco: «Amanda era su amiga, y conocía sus puntos débiles, pero otro enfrentamiento entre ellas era lo último que querría. Francisco le gustaba mucho, y congeniaban muy bien, pero había millones de chicos en el mundo.
Carolina lo tenía muy claro: Amanda podía irse buscando otro.»
La ultima frase rompe con el argumento previo… eso me desconcertó. Me gustaría saber…
Saludos Alan
¡Ojalá conociera al género femenino la mitad de bien de lo que supones! 😛
Esa última frase que te ha desconcertado es un giro humorístico. Realmente no rompe con lo anterior, pero lo hace de una forma inesperada. Ella no quiere discutir, y la mejor forma de que eso ocurra… es salirse con la suya. 😆
Saludos.
Eso pensé pero quería estar segura… me encanta el humor!
Carolina preciosa mia…no te plantees tantas cosas…Amanda está siendo clara…le gusta mucho muchísimo pero abandona…sea por tí o no déjalo estar…que manía con saber , tú a lo tuyo y espabílate o mira como está el patioooo…que Amanda es una tía legal…eh? pero a ver si aparece otra bucanera por ahí y este Francisco tiene mas alas que una docena de Lehas..asi que venga ponte las pilas….ainsssssss

Oye osi..ya te vale eh? ya te vale….que mira como me tienes desde la semana pasada
recuerdas?
y todo porque yo quiero saber que siente Francisco…!!! hombreeee ya esta bien….que me duelen las cervicales, se me salen los ojos y me va a tocar esperar otra semana más ….yo sigo buscando entre lineas no sea que ….ejejjej se te haya escapado algo …jijijijij
Un montón de besos con alas para ti….muakkkkkkkkkkkk
Realmente sí hay algo entre líneas, un detallito que sólo una persona apuntó en un comentario. Pero deja de buscarlo, que la tortícolis va a ser de aupa.
La semana que viene te lo cuento. Que sí, que tendrás noticias de Francisco el jueves…
Saludos con alitas. 🙂
Tachán, tachán, el pasado siempre vuelve, le ha tocado el turno de recordar viejos tiempos a Carolina y su coleguita Amanda. 🙂
Van dos jueves y estamos en ascuas ehhh… ¿Cuáles son las sensaciones del Don Juan Tenorio de Francisco ehhh, ehhh, 🙂 que parece que se le «aiga» tragado la tierra, o peor aun, a ver si ya ha quedado con otra chica más sin que lo sepan estas dos almas cándidas.
Alan guapetón (peloteando a ver si cuela :)), estírate un poquito anda, haznos un avance como hacen los grandes guionistas con los seriales de TV que tanto enganchan, «adelántese al próximo capítulo»… 🙂
Sonrisa de oreja a oreja para ti. 🙂
¿Quieres un adelanto? ¿Te vale con el título? Ahí va: «17.- Lo que queda al despertar 3: El retorno». Además… si has leído la última frase, ya sabes lo que va a pasar: Nos vamos a enterar de lo que piensa Francisco. 🙄
Si soy como un libro abierto… 😆
Saludos.
Quería empezar el comentario poniendo «tata, tachán…pero mira por donde «la sonrisaes gratis» se me ha adelantado.
Tengo que hacer una observación: Mi madre tenía razón. Menos mal que a mi ya se me ha pasado el arroz.
Carolina es un poco paliza, con tanta prueba y con tantos melindres. Como se descuide va a terminar por cansar a Francisco.
Contigo es estar en un sin vivir. Nos tienes a todas de los nervios.
Un fuerte abrazo
😆
Saludos.
Sigue sin gustarme Amanda.
Quiero saber qué piensa Francisco.
Quiero saber qué hará Carolina-la-complicada.
Me espero al próximo jueves, vale.
Un abrazo.
Pues eso. : – D
Saludos.
Cada vez se pone mejor, ya espero que llegue el próximo jueves, ahora vivimos los días distintos, esperando los jueves!!! Me despierta mucha curiosidad saber qué pasará, con quién se quedará Francisco, qué piensa él de Amanda, qué será de la amistad de Carolina y Amanda, etc….
Si lo estuvieras escribiendo tú, ¿cómo acabaría? 🙄
Saludos.
Aquí se va armar la de San Quintín, porque él se fijará en la otra y la ex va a aparecer. Lo que digo, la de SAN QUINTÍN O LA DE TROYA.
Chao
Ana
¿Quieres que metamos en escena a la ex? Podría salir ardiendo el ordenador… 😈
Saludos.
Buenos días anoche cuando publicaste ya estaba durmiendo ajajajaaa, siesque no puede ser contigo y con tus incognitas.
MIra, esto ya no me está gustando nada para Carolina, la veo una mujer muy insegura! y sólo se pone en órbita, cuando hay una rival y peligra su ego…prefiero que Francisco siga con Amanda, la veo una mujer legal y valiente.
Bueno ya me dirás que piensa Francisco porque esto ya pasa de castaño a oscuro hombre de dios, como se nota que eres hombre jajajaaa
Feliz viernes yo no aguanto una semana más ajajajaa
¿Insegura? Hay algo que no habéis tenido en cuenta… (será porque soy hombre… 😛 ) Pronto lo sabréis. 🙄
Feliz sábado…
Por cierto hoy mi nota muy alta para ti creo que tu imaginación no tiene límites osito
saludos escuetos
Muchas gracias. Me honra.
Saludos escuetos.
Buenos dias. Ufffff, eso esta que arde. Una es positiva, la otra, tajante; Francisco en medio de Troya…a ver por donde iran los tiros. Muy buena historia, y con mucha imaginacion.
Buen fin de semana
Saludos
Me alegro de que te… intrigue. Lo cierto es que escribirlo está siendo una experiencia muy gratificante.
Saludos.
Carolina debía tener la neurona patinosa cuando propuso a Amanda acudir en su lugar…
Si yo fuera Francisco, saldría corriendo en dirección contraria a ellas.
Pero no puedes huir de todas las mujeres…
Si tu enemigo es más fuerte, únete a él. 😉
Saludos.
Los mojitos, ya sabes…
Caramba. Cómo se complican la vida estas dos. Eso les pasa por acudir a internet. Un beso.
La realidad es mucho más complicada…
Saludos.
O_O ¿Y con esos antecedentes de rivalidad que tuvo con Amanda, no se le ocurre otra que mandarla a la cita?, jejeje, me has alegrado el desayuno… ¡ni se te ocurra mirar la hora!!
Mira, Carolina, te lo digo desde el cariño:
Si un hombre te gusta, NUNCA, ¿me oyes? NUNCA mandes otra en tu lugar en plan experimento!!!
¡Que no estás en una peli de vaqueros y no tienes que mandar a nadie delante a ver si hay peligro! 😆
Ay, ¡pero que risa, Alan!, nos prometiste una mezcla de amor – humor, y veo que estás en ello 😉
Pues nada, mujer… Me alegro de que te rías tanto…
Carolina tiene un as en la manga, algo que ha hecho delante de vuestras narices y no os habéis dado cuenta de su verdadera intención (y efecto). 🙄
Pero como no te gusta Carolina… 😛
Saludos.
Estas planteando muy bien como nos enrollamos, tanto mujeres como hombres, cuando nos gusta mucho alguien, hacemos suposiciones, sufrimos y hasta lloramos por los «quizás», mientras la otra personas a lo mejor esta muy tranquila sin saber absolutamente nada…, en este caso Francisco…
Un abrazo 🙂
O sabiéndolo absolutamente todo… 😈
Saludos.
Lo que más me intriga de este relato es un pequeño detalle: el teléfono no sonó. Qué sorpresa nos estarás reservando?
Un abrazo,
Ese detalle es para darle más rabia a Carolina. Cuando queda con ella, la ex da la paliza. Cuando queda con Amanda, ni una llamada. Es como si hubiera una razón oculta, para chinchar, pero no había planteado que hubiera algo más.
Aunque, ahora que me has llamado la atención sobre ello,… ¿quién sabe? 😆
Cuando alguien espera una sorpresa, y la recibe, ¿es una auténtica sorpresa? ¿No sería más sorpresa que no hubiera sorpresa? 🙄 En mi caso, no puedo evitar darlas, así que… hasta ahí puedo decir.
Saludos.
A ver como piensa Francisco que es el que tiene la sarten por el mango. Parece ser que Carolina lo clarisimo y Amanda aparentemente se retira pero como le gusta chinchar, no se no se.
Esperaremos…
Buen fin de semana.
Parece que ya no puedo ocultar lo que piensa Francisco por más tiempo, o me arriesgo a un motín a bordo… 😛
Saludos.
Ambas, en mi opinión, tienen una forma un tanta extraña de relacionarse con el sexo opuesto.
Pues sí, es posible. Pero se lo pasan «pipa»… 😆
Saludos.
Llegué tarde osito!!!! no me amonestes :S
¿Sabés en qué me quedé pensando? Que cuando Amanda golpee la puerta de Francisco para decirle la verdad, abrirá un mozo al que se le ha caído la bandeja
juap, juap
No te preocupes por la tardanza. 🙄 ¡Si yo te contara! 😆
¿Quieres decir que las orejas no serán lo único que tenga «gachas» Francisco? 😛
Saludos.
Las relaciones entre las personas son muy complicadas. Si le añadimos pasados comunes, aspiraciones futuras y presente incierto sale un cóctel explosivo.
A lo mejor si sonó el teléfono, no necesariamente debe hacer ruido para indicar llamada, o Amanda mintió. Una variable más.
Salut
Luego decís que soy yo el que complico las cosas, pero me preguntáis un montón de detalles que no pensaba que importaran, y ahora tendré que darles alguna trascendencia… 🙄
¡Venga variables!
Saludos.
Carolina parece una mosquita muerta pero en realidad, es muy pícara. Manda a su amiga para comprobar:
1. Si Amanda le es leal (con lo que hemos visto de su pasado.. ejem ejem).
2. Si la ex de Francisco hace acto de presencia de cualquiera de las maneras (generalmente por teléfono, cada vez que estaban Carol y él juntos, hacía su entrada triunfal con esa melodía…)
3. Comprobar descaradamente los sentimientos de Fran y su comportamiento con otras mujeres.
¿Qué necesidad tiene de manipular las cosas? Es más fácil que se hubiera dejado de tonterías y que hubiera quedado otra vez con Francisco sin engaños (la bucanera, Amanda), que le hubiera preguntado y dejado claro lo de su ex y ella, y los sentimientos que están atrapados en un volcán a punto de explotar en su interior.
Ahora, con lo enrevesado que está todo, ¿cómo se lo contarán a Fran? ¿qué pensará él? ¡Qué bien van a quedar las dos delante de él cuando se lo cuenten!
Esto cada semana se pone más y más interesante… ¡a ver cómo las sacas del lío Alan!
P.D: ¿cuándo entrará «La Campanera» en acción? xDD
Un saludo enorme.
No hay tantos engaños como parece, ya lo verás… 🙄
Lo de «La Campanera» lo tengo que pensar. 😛
Saludos.
Ufff, pues vaya…cómo se está poniendo la cosa…al igual que aquel rompecorazones con el que estuvieron a punto de perder la amistad entre ellas, y que resultó no ser lo que ellas creían que era…se dieron cuenta que no merecía la pena discutir por un tio…a Carol, esta situación le ha servido para darse cuenta de lo mucho que le gusta Fran, y que ahora estaba pasando por una situación similar…¿qué pasará?…mmm….para más información, no se pierdan el próximo capítulo jajaja 😀

Te dejo besitos para esta semana ….muchos, muchos…muakk!
Mira, se había ido a la bandeja de ‘spam’… Cosas de los duendecillos.
¿Qué ha pasado? Por aquí hay duendecillos…que acabo de darle a publicar comentario, y veo que se ha esfumado! grrr

Pues te decía que al igual que antaño, aquella discusión entre ellas por aquel chico, que no resultó ser lo que ellas creían que era…esta situación le ha servido a Carol para darse cuenta de lo mucho que le gusta Fran, y ahora resulta que se encuentra en una situación similar….que no le gusta nada, porque no quiere perder su amistad de toda la vida con Amanda.
¿Qué pasará? mmm….para más información ..no se pierdan el próximo capítulo 😀
Que tengas una bonita semana osi…te dejo besitos ..muchos, muchos…
Tú misma te contestas… 😆 Excepto lo de los duendecillos, con lo que no te puedo ayudar. 🙄
Saludos (y gracias por tal cantidad de besitos 🙂 ).
Qué tía más complicada la Carolina, y no me gustan las tías complicadas porque me recuerdan a mí, así que hazme el favor y que se ubique. Espero al siguiente capítulo…
¿Te hago el favor y que se ubique? 😀
¿Te parece complicada? Pues a ver qué te parece en el próximo capítulo… 🙄
Saludos.
Sip, me parece muy complicada, lo del favor es una expresión…
Ya lo sé, mujer…
Bueno no te barajearé esta vez todas las posibilidades 😉
Pero me gustó la determinación que tomó Carolina, al plantarse y decidir que Amanda se puede ir buscando a otro.
Algunos días estoy con Caro, otros con Fran quizá la que sigue con Amanda, logras que nos identifiquemos con cada uno de tus personajes. Muy bien.
Salud-osito
¿Con quién estarás el jueves? Mientras estés con alguien… 😉
Saludos.