4.- En el Café España, a las ocho.

Francisco dejó a su hijo en el portal de su ex, tras pasar el fin de semana con él. Consultó el reloj y comprobó que iba algo justo para llegar a tiempo al café España. En otras palabras, que llegaba tarde.

Vio un sitio para aparcar, y dudó si hacerlo. Aún podía encontrar sitios más cerca, y ese era bastante justo, pero, si no aparcaba ahí, seguro que no habría ningún sitio más cerca, y su retraso sería mayor. Era un claro ejemplo en el que la Ley de Murphy se saldría con la suya, eligiera lo que eligiese. Decidió aparcar, con múltiples maniobras, y caminó deprisa hacia el lugar del encuentro.

Dos mujeres le cortaron el paso ocupando toda la acera con su lento caminar. Iban hablando.
— ¿Qué me das por mi marido?
— ¿Yo? Nada.
— Trato hecho. Para ti.

Las esquivó bajándose de la acera y sonrió al ver otro sitio para aparcar. Y otro más. En ese último cabía un autobús. Sabía que los encontraría desde el momento en que decidió aparcar tan alejado. Si hubiera optado por acercarse con el coche, esos sitios habrían estado ocupados. Es curioso cómo conspira el universo contra nuestra puntualidad.

Francisco odiaba la impuntualidad. Tanto la propia como la ajena. Le parecía una falta de respeto. Si tuviera el número de Carolina, llamaría para avisarla de que llegaba cinco minutos tarde. Entonces se dio cuenta de que al tener que llevar a su hijo no había tenido mucho tiempo de pensar en su cita con Carolina. ¿Acudiría ella, o le daría plantón? Si lo hacía, la única forma que tenía de contactar con ella era el correo electrónico, y dependería de que ella quisiera contestarle. Notó junto a su corazón un temblor inconfundible.

En el bolsillo de su chaqueta, su teléfono móvil estaba sonando, y vibrando. Aguzó el oído y respiró aliviado. No era «La Campanera», no era su ex. Consultó la pantalla: Número desconocido.
— ¿Francisco? Soy Carolina.
— Sí, en dos minutos estoy ahí. No tardo nada.
— De acuerdo.

Al menos no parecía que le hubiera dado plantón. Aceleró el paso mientras miraba a todas las chicas con que se cruzaba. «¿Y si fuera como ésa?» se preguntaba con cada una de ellas. Se obligó a pensar que sólo habían quedado a tomar café, y que él realmente no quería nada más. Tenía el control de su vida, y no pensaba perderlo. Además, entre sus horarios de trabajo y sus obligaciones familiares, tenía bastante poco que ofrecer.

Estaba nervioso. A sus años. Cuarenta y dos.

Otro sitio libre para aparcar, justo en la puerta del Café España.

Respiró profundamente y entró en el local.

No había mucha gente. Se fijó en las mujeres. Ninguna estaba sola. Vio dos acompañadas por chicos, y parecían ser parejas. En las mesas del fondo había un grupo de tres mujeres y otro de dos, todas ellas mayores. Mayores de la edad que había adjudicado a Carolina. ¿Se habría equivocado? ¿Habría ido con su pareja? ¿Sería alguna de aquellas señoras mayores?

Miró con más detenimiento. Había un chico con un ordenador. Si no hubiera hablado con Carolina por teléfono, podría encontrarse con la sorpresa de haber quedado con Carolino. En Internet nunca se sabe. Pero engañar con la voz por teléfono, aunque es técnicamente posible, le pareció altamente improbable.

Tomó el teléfono, buscó la última llamada entrante, y pulsó el botón de llamada. En ese instante, una de las dos mujeres de la mesa del fondo cogió su bolso y lo abrió. Aparentaba sesenta años, aunque podría ser más joven. Pero su forma de vestir era de esa edad. Era gordita, algo que a Francisco no le agradaba: Le recordaba a su ex, y no quería relacionarse con nadie que le recordara a su ex. El peinado que llevaba permitía adivinar rulos nocturnos, y a Francisco le llegó la imagen de esa cara cubierta con un potingue verde claro y rodajas de pepino.

«Por favor, que no sea ella», pensó.

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Acerca de Alan Rulf

Alan Rulf es el pseudónimo que recoge mi faceta de escritor, para separarla de otros intereses y aficiones.
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61 respuestas a 4.- En el Café España, a las ocho.

  1. zambullida dijo:

    ¡¡ Por favor que no sea ella !!

    Ahora, en tiempos de crisis, la compraventa de maridos se ha convertido en un negocio boyante. 🙂

    • Alan Rulf dijo:

      Y más con ese precio… 😛

      ¿Y si es ella? También tiene derecho a tomarse un café con el autor del ‘blog’…

      ¡Es verdad! Que quedamos en que esto era una historia de amor… Es que así le quita todo el suspense…

  2. 😀 😀 😀 Me encanto, bien por el chascarrillo de las dos que iban haciendo transacciones por el marido.
    «Notó junto a su corazón un temblor inconfundible» por un momento me emocione pensando que había localizado a Caro con la mirada y que su corazón se lo indicaba jajajajajaj… pero era su movil.
    ¿Y si de verdad fuera unos sesenta años?
    Saluditos.

    P:D Me llovieron piedras con lo de la impuntualidad 😦 ¡Auch!… lo siento.

    • Alan Rulf dijo:

      Pero él no sabe cómo es Carolina. No podría haberla reconocido…

      No sabemos los años que tiene, pero sabemos que tiene dos hijos en edad de ser compartidos con su ex. Si tuviera sesenta años, tuvo que tenerlos muy mayor…

      … o haberlos adoptado. ¿Tendrá sesenta años? ¿Aparentará sesenta años?

      Parece que queréis que él sea George Clooney. ¿Y ella? ¿Cómo queréis que sea?

      Saluditos.

      P.D.: Lo de la impuntualidad no tiene nada que ver contigo. 😀

      • Ya lo se, que no tiene idea de como es en realidad, por eso me emocione pensando que su corazón se lo indicaba con un temblor. Son de esas cosas extrañas que …ya te contaré, ya sabes esta romantica, sabe de esos temblores del corazón que se emociona cuando siente el amor cerca 😉
        Saluditos.

  3. bypils dijo:

    Me encanta!
    Mi mascarilla facial es de color azul fosforito…!Me deja el dial finísimo! ; – )
    Un abrazo calur-oso.

  4. Recordando, recordando caigo en la cuenta de que tampoco nosotros tenemos idea de como puede ser Carolina. Solo sabemos, que está felizmente divorciada y que es una mandona… lo mismo podría ser la señora de rulos.
    ¡Pobre Francisco con la mala suerte que tiene…¡

    • Alan Rulf dijo:

      En efecto, no tenemos ni idea. Podría ser la señora de los rulos, que, aunque no tenga 60 años, los aparente…

      Estoy por hacer una encuesta, a ver qué queréis 😛

      En una historia de amor, ¿los protagonistas tienen que ser ideales de la muerte? ¿O mejor que tengan defectillos? No contestes, ya sé la respuesta.

      ¿George Clooney con quién? 😀

      Saludos.

  5. Por favor nooooooooooo!!!!!!! No nos hagas esto ositooooooo!!!
    Lo del universo conspirando en contra de la puntualidad… Ah caray! Es tal cual! Más aun con los lugares para estacionar…
    Pero…. A quién llamó Francisco si la llamada de Carolina salía como número desconocido?

    • Alan Rulf dijo:

      Mujer, número desconocido significa que no lo tenía en su agenda, no que fuera un número oculto. Llamó a Carolina. Entonces la señora de los rulos abrió el bolso, y… llegó el intermedio de la película, y toca morderse las uñas durante una semana.

      En esta historia es más ‘light’. En el «Diario de mis miedos» estas pausas semanales eran mucho más intensas. No es lo mismo que la intriga sea con quién ha quedado a tomar café, o que vaya a entrar en una habitación donde ha oído el ruido que han hecho unos espíritus…

      Pero yo me divierto lo mismo, sea como sea, y os recomiendo a todos que lo probéis. Lo único es que requiere hacer historias más o menos largas, pero es genial.

      Saludos con burbujas.

      • Ay no me retes! Aquí si sale desconocido, no se puede volver a llamar.
        Me encantan la intriga!!! Voy a probar «el diario»… Pensar que de pequeñita comencé con cuentos de terror… Pero ahora me da miedo hasta imaginarlos! ajajaja
        En cuanto a la encuesta, voto de nuevo por un George Clooney, con unas canitas dándole luz a su look light e intelectual… Carolina: Julia Roberts escondida detrás de unas gafas y con el pelo recogido… Ah…, me dieron ganas de escribir una historia de amor…
        Saludos, con burbujas!!!

  6. lehahiah0909 dijo:

    No va a ser ella.!!!! Carolina no se pone rulos…pero si eso no se lleva ni en Murcia…( pido perdón a l@s Murcian@s es solo una expresión) no puede aparentar sesenta hombre…sera normalita digo yo…ganará de cerca seguro…y no le recordará para nada a su ex ¡¡¡nuuuuuuuuu!!!…Francisco parece muy legal…ahora osi te toca perfilar tu a Carolina…no la hagas muy «estirada» eh? jejjeje ay como me gusta esto.!!! ….
    La puntualidad de Francisco me encantaaaaaa…es de los mios…mira que me cae simpatico…lo dicho..esmérate con Carolina …….sino te voy a echar una buena bronca….jejejje
    Muchos besitos con alas mitad para ti….mitad para Francisco..jijij…muakkkkkk

  7. Una dijo:

    Igual Carolina esta en el baño por los nervios y ha dejado el bolso en la mesa de su madre que la ha acompañado junto a su amiga o su tía por si las moscas, Ellas pensaran imagínate que Francisco sea un tipo de estos raros…
    Buenas noches Alan.

    • Alan Rulf dijo:

      Si Carolina se ha hecho acompañar por su madre y por su tía… no creo que le guste a Francisco. Vamos a dejarlo ahí. Además, lo normal sería que se hubiera llevado el bolso…

      ¿Será Francisco un tipo de esos raros? ¿De esos que tienen un ‘blog’ y escriben todo lo que se les ocurre disfrazado de oso? 😀

      Saludos.

  8. gaviotasinamor dijo:

    Buenos días osito, voy a leer tu última entrada las otras ya veremos si puedo lo intentaré antes de irme vale?
    Mira no me gusta que se ridiculice a la mujer, ni de sesenta ni de cuarenta, lo de los rulos ya pasó a la historia osito, lo recuerdo en las pelis de Pajares y Esteso….vamos hoy en día hay mujeres de cincuenta y sesenta años que están estupendas y te pondria miles de ellas, pero bueno allá tú…a veces somos crueles sin saberlo, que no intento defenderme de nadie ni de nada, pero la mayoria de hombres, son así, como él de tu historia.
    Dirás que digo esto porque soy cincuentona, pero no, lo digo porque no es justo que las señoras tengan que ser divinas de la muerte! que también se puede uno enamorar, de una gran persona, con un buen corazón, que también hay señores de cuarenta que parecen cincuentones con barriga cervecera incluida, ajajajajajajajaa.
    Tu post es muy bueno, has logrado intrigarme mucho….
    Saludos y hasta mi vuelta

    • Alan Rulf dijo:

      Por mi parte, tengo amigas de TODAS las edades.

      Está lejos de mi intención ridiculizar a nadie. Si te das cuenta, he hablado de sus gustos haciendo referencia a que no le recordara a su ex. Respecto a la edad, lo más normal es que prefiera encontrarse (para una historia de amor) con alguien de edad similar a la suya (42), salvo que la diferencia de edad sea uno de los temas a tratar en la historia. Si se encontrara con una chica de 20 tampoco sería fácil algo más que un café, ¿no crees?

      Sé de sobra que hay muchas mujeres de esa edad que están imponentes, pero no es el caso de la que he descrito. He exagerado a propósito, como con el tema de los rulos y la máscara de crema con rodajas de pepino. Además, he hablado de tener esa edad o de aparentarla. A nadie le agrada una persona que aparente veinte años más de los que tiene. Por supuesto que hay señores que están muy mal. De hecho, creo que es más común en los hombres que en las mujeres, porque, por regla general, nos cuidamos menos, y eso se nota.

      Lo de la barriga cervecera es caso aparte.

      Que no te enfades, que sabes que no me gusta reírme de nadie, y si lo hago empiezo por mí mismo. Conviene que te leas los anteriores capítulos, y los siguientes. Ya tocará reírnos de las manías de Francisco… (ya hemos empezado, con sus traumas por la edad, algo que sin duda influye en que quiera alguien de su edad o algo menor, en plena crisis de los 40).

      Pásalo bien en Cantabria.

      • gaviotasinamor dijo:

        PARA NADA ME HE ENFADADO OSITO Y NO IBA PARA TI MI COMENTARIO, IBA PARA EL CHICO ESTE DE 42 AJAJAJAA TE PIDO DISCULPA SI TE DIE SA IMPRESIÓN, AJAJA TAMPOCO ME DI POR ALUDIDA PORQUE NO TENGO SESENTA AÑOS AJAJAJAA PERO BUENO SIEMPRE SE INTENTA RIDICULIZAR A LA MUJER Y NO SÉ PORQUE, SI NO E SUNA CHICA DE ENTRE VEINTE Y TREINTA AÑOS,SE HACE, EN FIN ASÍ ES LA VIDA Y ASI ES ESTA SOCIEDAD, PERO QUE QUEDE CLARO QUE TAN SÓLO HA SIDO UNA OPINIÓN PERO PARA NADA HA SIDO PERSONAL ACLARADO? GRACIAS A DIOS ME ENCUNETRO MUY AGUSTO EN MI PIEL
        AHORA SI TE DOY EL BESO!!

      • Alan Rulf dijo:

        ¡Te ibas sin beso! Que sea la última vez…

        Sabes que en este ‘blog’ no se ridiculiza a la mujer, ni al hombre. Lo sabe cualquiera que haya leído unas cuantas entradas.

        Un beso, sin que sirva de precedente… 😛

  9. aslaram dijo:

    Buenos dias. Como siempre, un buen relato sacado de la misma vida real. Algunas mujeres de hoy en dia, no son como las de antes.
    Bueno, que algo me llama y me tengo que pirar a ponerme bella…jejejeje
    Feliz fin de semana
    Saludos

    • Alan Rulf dijo:

      Algunas mujeres do hoy en día no son como las de antes, y otras son como las de antes de la guerra.

      Disfruta de tu «cita» (o lo que sea «algo»). 😀

      Saludos.

  10. Vane dijo:

    Ay… será ella? no??? que con esto de internet…. nunca se sabe lo que se puede encontrar uno!
    Pero… yo creo que Francisco no iba sólo buscando tomarse un café…

    besines

  11. winnie0 dijo:

    Vamos a ver…. si es ella…¡qué chasco!
    Si no lo es…..¡qué chasco, se ha largado por tardón!
    En cualquier caso…no nos engañemos, para ciertas situaciones el amor sí tiene edad…aunque luego pueda superarse……
    Besitos Alan

    • Alan Rulf dijo:

      Mujer, ha tardado muy poco…

      Qué duda cabe que es mucho más fácil con edades similares, porque así es más probable que se compartan gustos y preocupaciones, entre otras cosas. Por ejemplo, por mucho que me pueda gustar el físico de alguien mucho más joven, será difícil que tengamos mucho más en común. Y el amor tiene mucho que ver con eso.

      Saludos.

  12. micromios dijo:

    Y si es ella ¿qué?, si solo quiere tomar café. Igual resulta poseedora de una conversación chispeante que le alegra la tarde. El mundo está lleno de sorpresas no siempre envueltas en papel brillante.
    Salut

    • Alan Rulf dijo:

      Si es ella tomarán un café, tendrán una conversación interesante (casi seguro), y ellos verán si quieren volver a quedar. Como tú dices, el mundo está lleno de sorpresas.

      En realidad no quiere tomar café. Eso es una excusa. Lo que quiere es conocer a la persona que puso el comentario en su ‘blog’, dado que la casualidad hace que vivan en la misma ciudad. Y eso lo va a hacer, a condición de que la interfecta aparezca, sea quien sea.

      Lo del papel brillante es sólo un anzuelo, pero sigue haciendo que la gente pique.

      Saludos.

  13. susana dijo:

    Qué interesante. ·Estoy deseando ver la continuación. Un beso.

  14. Emy Tecuento dijo:

    ¡En ascuas me tienes, Alan! 😀

    ¡¡Me gusta Francisco!!
    Es puntual, cosa poco frecuente, ¡y que me chifla!, jejeje, además ya empieza a tener “temblores” en el corazón… ¡¡¡va a resultar ser un romántico!!!

    Nooooooo, no me puedo creer que la que abre el bolso sea Carolina… ¡aunque puede que sea ella, que sea más joven de lo que aparenta porque ha perdido el interés en arreglarse, y… y… ¡y puede que Francisco le quite las gafas, le deshaga la coleta y le suelte la melena, y… y…

    Juass, ¡como me estoy divirtiendo!!!

    ¡¡Siempre desde el cariño!!

    • Alan Rulf dijo:

      Mujer, los temblores eran el móvil vibrando… 😛

      ¿Hacemos un «Betty la Fea»?

      Prefiero inventar mi propia historia…

      Al decir «mi» no quiero decir que me haya pasado…

      Tampoco quiero decir lo contrario…

      Es que no quiero decir nada al respecto…

      … ¡¡¡porque yo también me estoy divirtiendo!!!

      Saludos desde el cariño. 😀

      • Emy Tecuento dijo:

        ¡Jo, que desilusión!, como yo lo llevo en el bolso… pues eso del corazón, jejeje, ¡Alán, que me lías!!

        No, no, no, claro que no es “tu” historia, pero aparte de la edad 🙄 hay cosillas que os veo en común…
        ¡Ves!, ahora voy con precaución, no vaya a pasarme como con las vibraciones del móvil!!

        Me parto…

      • Alan Rulf dijo:

        Si lo vuelves a leer, verás que lo llevaba en el bolsillo de la chaqueta. 😛 Ha sido intencionado. 😀

        Deja los pies de plomo para otros ‘blogs’. Te prefiero desenfrenada… 🙂

  15. annefatosme dijo:

    Espero que sea ella Carolina, aunque la marca de los rulos me eche un poco por atrás. Abajo el machismo! Un sesentón puede salir con una mujer más jóven pero la viceversa indigna hasta a las mujeres de este blog!!!!! No me lo puedo creer! Alan, eres incorregible!
    Un abrazo,

    • Alan Rulf dijo:

      Precisamente en la entrada dedicada a Cupido (en «Mitos revisados» hice objeto de risa la situación contraria, la del sesentón (o más) con una jovencita. No hay machismo, en absoluto. Como mucho, una reflexión sobre diferencias de edad en las parejas. El que lo quiera reflexionar, claro.

      Yo no podría salir con una chica veinte años más joven que yo, ni con una veinte años mayor que yo. Y no es una cuestión de dinero (que suele serlo), sino de compartir cosas, de complicidad, de haber vivido experiencias similares, de llevar un ritmo de vida parecido, de tener los mismos problemas y las mismas inquietudes… No es machismo (Abajo el machismo, por supuesto). Las personas de otra generación tienen una vida y unas preocupaciones muy distintas.

      Y te sorprendería saber lo corregible que soy. 😛

      Saludos.

  16. Profa. Elizabeth Vargas dijo:

    Muy buena historia, ya quiero leer la próxima parte, me llena de intriga. Creo que el vivir ese momento de encontrarse con alguien que conociste por Internet me hizo sentirme identificada, pero más aún porque mi hermana se casó con un chico que conoció a través de la página. En cuanto a la puntualidad, creo que soy como Francisco. Bueno, quiero seguir leyendo….

    • Alan Rulf dijo:

      Internet ha cambiado muchas cosas, porque permite un tipo de comunicación que antes no era posible. Eso de poder estar conectado desde tu casa con todo el mundo para compartir información en varios formatos está logrando, por ejemplo, que se vea menos televisión.

      Los modelos tradicionales de conocer personas tienen una muy fuerte competencia. Y no hablo sólo de «ligar», sino también de amistad o relaciones profesionales. Tenemos acceso a tanto, que el problema suele ser elegir, seleccionar lo que buscamos.

      Como a mí también me gusta la puntualidad, podrás seguir leyendo el próximo jueves, a las 22:00, hora española. 😀

      Saludos.

  17. Kathy dijo:

    Lo de aparcar sucede, y me a sucedido muchas…muchísimas veces. Pienso que el chico con ordenador es el hijo de Carolina y ella está en el baño con el otro niño, porque si no me equivoco anteriormente se nombro la palabra hijos, pueden ser 2 ó 3, no creo más que ese número, Y si fuera una de las mesas con las mujeres mayores, a lo mejor se fijo en la de rulos por su esposa y no puso atención a la otra y tomo el bolso para buscar algo en él y no exactamente un teléfono…ayyy!!… que sucederá…cada vez tus historias son más entretenidas, un abrazo y un buen fin de semana.

    • Alan Rulf dijo:

      Carolina tiene dos hijos (una parejita), pero no los ha llevado a la cita. Ha aprovechado que estaban con su ex para quedar. No sería recomendable llevarlos a su primera cita con alguien conocido a través de Internet, ¿no crees?

      Es curioso cómo buscáis posibles explicaciones a la situación planteada, con cosas que no se me han ocurrido ni de lejos.

      Saludos.

  18. jezasanchez dijo:

    Buenísimo, me siento intrigada. ¿Quién será Carolina?

    Saludos.

    • Alan Rulf dijo:

      Bienvenida, Jezabel.

      A Carolina la conocerá el jueves que viene.

      Intuyo que, de lo que tengo por aquí, lo que más te gustará será el «Diario de mis miedos» (tienes el índice de todo en la columna de la derecha). Espero que disfrutes.

      Saludos.

  19. Hola Alan, muchas gracias por seguir mi blog, te lo agradezco mucho. Tu trabajo muy bien. Veo que te gusta Hitchcock, qué me dices de Ingmar Bergman, en lo personal me encanta.

    Saludos.

    • Alan Rulf dijo:

      No me des las gracias, lo sigo porque me parece interesante. Gracias a ti por escribirlo.

      Me temo que Ingmar Bergman lo tengo en mi capítulo de asignaturas pendientes… 😦

      Hitchcock me gusta por su técnica del suspense, por su humor negro, y por su imaginación.

      Tuve mi época de Lovecraft; Poe siempre me gustó; y Stevenson tiene algunas obras que me resultaron muy sugerentes («Olalla», «el club de los suicidas», «el diablo de la botella» y, por supuesto, «el doctor Jeckyll y Mr. Hyde», aparte del clásico «La isla del tesoro», que recuerdo como más infantil, aunque tal vez me sorprendería si la volviera a leer).

      Me llamó la atención que reunieras a los tres en tu nombre. Me gustó encontrar otros autores como Wells, Maupassant, Borges, Bram Stoker (me sorprendió encontrar una foto, no había visto ninguna), Ambrose Bierce, Houxley…

      Me gustan los ‘blogs’ que tienen su propio estilo, y más si me gusta ese estilo. Lo «malo» de llegar a un ‘blog’ con tanto contenido como el tuyo es que se tarda mucho en verlo entero, y el tiempo es un bien escaso. Poco a poco.

      Saludos.

  20. flori dijo:

    Me causo mucha gracia: «— ¿Qué me das por mi marido?
    — ¿Yo? Nada.
    — Trato hecho. Para ti.» Porque suele pasar Alan.

    Y que sea mayor, es cierto que al principio podria funcionar pero luego se hace presente la brecha generacional…

    Un saludo!

    • Alan Rulf dijo:

      Es un chiste que me contaron, y lo quise compartir de esa forma… 😀

      Estoy de acuerdo en lo de la brecha generacional. Me parece muy complicado.

      Saludos.

  21. Concha Huerta dijo:

    Compraventa de maridos… Me apunto!!

  22. Brisa dijo:

    Cielos!!!! se me acumula el trabajo!!!!
    Hoy no tengo tiempo, pero prometo volver!!! jejeje, curiosa también soy, si 😀
    Toma unos de estos… los dejo bajo la puerta. Cuidadín no vayas a pisarlos!!!

  23. lehahiah0909 dijo:

    Vengo volandoooo con una cuchaaaara…uy pero si estaba llenaaaa!! ummmmm…bueno ahora la vuelvo a llenar osi…que tengo mucho para ti..muakkkkk

  24. Para mi que a Francisco le ha traicionado el subconsciente, se ha dejado llevar por una primera impresion de una persona que puede que sea o tal vez no… ¿Qué pasa si es? ¿Va a salir corriendo con el rabo entre las piernas? ¿Acaso él es un mister? 🙂
    A priori parecía que le daba igual la apariencia de Carolina, pero preferiblemente que sea delgada, rubia y de ojos azules ¿no? 🙂

    • Alan Rulf dijo:

      No saldría corriendo, seguro. Tomaría el café, y le daría una oportunidad. Él seguro que no es Míster Universo, pero sería hipócrita decir que la primera impresión no cuenta.

      Si tú quedaras con alguien, ¿te daría igual su aspecto físico, su edad, sus gustos…? No es cuestión de arquetipos. Francisco prefiere a alguien que no le recuerde a su ex, alguien que sea aproximadamente de su edad y mentalidad… No creo que sea tan reprobable.

      Uno de los chicos más feos (objetivamente hablando) que he conocido, si no el que más, era delgado, rubio y de ojos azules. Eso tiene muy poco que ver, es más bien el conjunto lo que cuenta. El conjunto, y lo que sugiere.

      Por cierto, el chiste del principio, el de «¿Qué me das por mi marido?…», me lo contaron como dos hombres hablando, y era «¿Qué me das por mi mujer?…» ¿Habría sido igual si no lo hubiera cambiado? ¿Habría recibido más críticas? Lo dejo en el aire…

      Saludos.

  25. Jajajjaj! me parto con lo de Carolino jjjj, tienes unas cosas…bueno, la verdad que en una situación así, debes pensar de todo…Iba el pobre de flor en flor, que si lo del aparcamiento..qué verdad que es, que seguro que si hubiera buscado otro más cercano, habría perdido éste, el otro y el de más allá :), Suele pasar, y qué rabia que da ¿eh? que después de estar maniobrando y sudando la gota gorda por no perder el hueco, luego ves que más cerquita habia tropecientos y más grandes…grrrr..
    Luego, que si ve uno justo en frente bien grandote…luego que si se cruza con doñas lentitudes, y encima rifándose al marido? jajajajajajaj! ainss, el pobre fliparía esa tarde en colorines…luego el supuesto Carolino tecleando, que también fundió varias neuronas dándole a la cabeza si fuera él…y para colmo, la llamada de Carolina, y justo es cuando aquella mujer, coge el teléfono en ese mismo instante…la de los rulos nocturnos, la entradita en carnes que le recordaba a su ex….pufffffffffffffffffff osito, osito…esto se pone al rojo vivo! 🙂
    ¿Qué será, será? ¿será pura coincidencia? ojala y sea eso eh?…ojalá…porque el pobre lleva «la negra»
    Hala…toma besitosos doradosos …muakkkkkk!

  26. niphredil1 dijo:

    Jajaja ¡Qué bueno Alan! Comercio de hombres como si nada, Francisco que llega tarde, nervios, nervios y más nervios. Además, se añade al cóctel la Ley de Murphy… ¡Ni que fuera a casarse con aquella mujer con la que tan solo iba a tomar un café! Eso es que le ronda otra cosa en la cabeza… o al corazón. Carolina parece que deja huella.

    Saludos =)

    • Alan Rulf dijo:

      Yo creo que, en esas circunstancias, siempre tienes una cosilla por dentro, que se traduce en nervios y ganas de agradar, tengas la idea que tengas en la cabeza. Si no quisieras que saliera bien (sea «bien» lo que sea), no habrías quedado, ¿no?

      Saludos.

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