Resultó contagiosa la actitud del pensador, cuya piel, a pesar de haberse quedado de piedra, lucía un precioso tono bronceado propio del mejor agosto.
Ya metido en situación, pensé que el regalo no era tal, y no porque fuera una faena tener que decidir, sino porque, una vez decidido, no hace falta ningún secreto para llevarlo a la práctica. Sospecho que el que quiere ser realmente feliz ya sabe internamente cómo conseguirlo. Lo mismo digo del que quiere saber en qué consiste la verdadera felicidad: en el fondo, ya lo sabe, aunque se niegue a aceptarlo. Por último, el que decida hacer felices a los demás, ¿a qué espera? Ése también conoce el camino, sólo tiene que decidirse a recorrerlo.
Llegada la noche, había perdido otro día en esa extraña ciudad sin recuperar mi vehículo. Lo peor es que nadie me creería cuando lo contara en casa. Busqué alojamiento en un hotel barato, y me dispuse a cenar. Tomé asiento junto a un señor mayor que haría buena pareja con el holandés errante, o con Fausto. Mientras esperábamos el primer plato, acaso por hablar de algo, se dirigió a mí.
— ¿Se ha enterado usted de que se acerca el fin del mundo?
— Sí, claro. Se acerca el fin del mundo y se aleja el principio, porque el tiempo fluye en esa dirección inevitablemente. Ahora bien, si se refiere a la profecía de los mayas, déjeme aclararle que no le doy la más mínima credibilidad. Sin embargo, si está queriendo decir que van a cerrar el periódico «El Mundo», acaso por efecto de la crisis, estoy seguro de que no es más que un rumor infundado difundido por sus competidores con malévolas intenciones. A no ser, claro está, que usted sea de los que opinan que todo tiene un porqué, un sentido, y que todo se dirige hacia ese objetivo. ¿Cree usted, en ese caso, que ya falta poco para alcanzarlo? ¿Y luego qué, el juicio final? No creo que haya suficientes datos objetivos como para poder justificar tal afirmación tan a la ligera. Y debe tener cuidado con quién elige para decir eso. Si yo fuera un humorista malo, le aseguraría que el fin del mundo es la ‘O’, y que el principio es la ‘M’, y me quedaría tan a gusto. Pero no, yo no creo en absoluto que se vaya a terminar el mundo. Por desgracia, porque visto lo visto, no le venía nada mal. Aunque se terminara sólo durante unos días…
La cara de agradecimiento de ese señor hacia el camarero que me trajo los entremeses fue todo un poema. No se atrevió a volver a abrir la boca durante el resto de la cena. Yo, por mi parte, me había despachado a gusto. Creo que había permanecido demasiado tiempo cerca del pensador. O en esa ciudad. O sin vacaciones. O escribiendo mi ‘blog’. O buscando un…
¡Eh! que sere la primera en comentar por primera vez en tu blog… bueno aunque mejor mañana, casi son las dos aqui, no vaya a escribir algun disparate, pensando que es un sueño. Buenos dias alla.Regreso despues de dormir un poco ¡Auuummh!!!
🙂 Anda, vete a dormir… 🙂
Buenas noches.
El fin del mundo va asociado a la religión, ¿no?
Yo no creo en ninguna religión así que, temo que no me dejen participar en el juicio final y es una lástima porque he sufrido la irracionalidad de alguna religión en familiares cercanos y me gustaría poder hacer mi acusación particular contra ellos.
Entiendo que haya personas con necesidad de creer en algo para motivarse, yo no lo haría, mi fuente de motivación está en mis hijos, mi pareja, las cosas que me regala la vida sin necesidad de estar afiliada a nada, simplemente por existir. Claro que cuando algo malo me ocurre, no puedo culpar a un Dios concreto ni al diablo ni nada de esto y me toca hacer un ejercicio de responsabildiad y ver en qué medida he sido responsable o no.
¡Ups! ¡¡Perdón por el rollo!!!
Feliz lunes (festivo en Catalunya así que los niños todavía duermen y yo tomo café tranquilamente).
Saludos matutinos.
Es que yo no asocio el fin del mundo a la religión. No más que a la física, por ejemplo. Lo asocio mucho más a la superstición y a las películas catastróficas. O a la tercera guerra mundial, esa que empezará por un poco de petróleo o por un fanatismo religioso (que sí, es religión, pero no a lo que tú te refieres…)
Si allí es festivo, el feliz lunes es para ti. 🙂
Saludos.
Buenos días Alan, mira yo pienso como tu amigo mensnudum, esto es cosa de las religione sy como yo soy atea pues nada ni caso, si puede ser que algún día ocurra,

lo que ocurrió con nuestros antepasados los dinosaurios, que quizás un meteorito enorme o algo similar, vuelva a caer sobre la tierra y todo termine de una puñetera vez.
Bueno como me ves ya he vuelto, en la playa muy bien pero sin sol…aquí te dejo una foto mia de ayer jijijijjijijj.
Que no, que no es cosa de religiones; y si lo es, es en un sentido tan amplio, que el ateísmo o la ciencia también son religiones. Aunque, si nos ponemos así, también el fútbol lo es, con sus ritos, sus reglas, sus ídolos, sus reuniones semanales…
Pues no creas que no te habría cambiado el puesto ayer, tú aquí y yo tirado en la playa, aunque no hubiera sol (que a mí me da lo mismo, así no me quemo y puedo estar más rato…)
Saludos.
Por alusiones Carmentriste: mensnudum es una chica!!! 😉
🙂 😀
Bueno pues te pido disculpas ajajajaj esque en tu nick no queda claro si eres chico o chica lo dicho disculpas bonita!
No pasa nada. Mensnudum viene de mens (mente) y nudum (desnudo). Mensnudum nos desnuda su mente en su ‘blog’.
Alan,
Deja el coche tirado y olvídate. Vete a la playa o a la montaña ( mejor, ¿no?). Descansa y vuelve más tarde…
El «Bloqueo por Verborrea» al que sometes a este hombre, con la paciencia infinita que has demostrado hasta ahora, demuestra que necesitas unas vacaciones. Un paroncito de nada. Te irá bien.
Te vigilamos el coche.
Un abrazo.
N.B : Delante del Cole había un Bar ( bareto) que se llamaba «El Mundo». Allí hacíamos «campana» o nos reuníamos al final de clase. Cuando lo cerraron, para nosotros fue el «Fin del Mundo» . 😉
Luego me dieron remordimientos. Seguro que sólo pretendía hablar de cualquier cosa, pero supongo que no me pilló en buen momento. Intentaré descansar esta noche, y mañana recojo el coche y me voy. No pienso pararme con nadie más.
Si es que esta ciudad me tiene atrapado…
Muy bueno tu «Fin del Mundo».
¿Sabes qué Osito? Yo sé que todo, todo tiene un principio y un final… Y el Mundo no iba a ser menos… Mira, a mí «siempre» (no solo ahora por las circunstancias ¿vale?) me ha gustado y me gusta vivir cada día, como si fuera el último ¿sabes? no sea que por no hacerlo, me lo vaya a perder… Y son tantas las cositas que caben en un solo día… ¿Lo has pensado alguna vez? «Cada día importa»
Así que hoy es un día muy, muy bonito… Te deseo un feliz hoy… No te lo irás a perder ¿A qué no? ¿Eh?
Y tampoco nos vamos a quedar sin nuestro abrazo ¿No? Es algo en lo que «ganamos los dos», nadie pierde, jejejeje!!!
Va, ven aquí >—O—< ¡Muah! ¡Muah! ¡Muah!
Yo soy más de pensar en el mañana, no lo puedo evitar. Y, visto lo visto, tampoco estoy seguro de que sea la mejor actitud. Pero es muy difícil cambiar ideas tan arraigadas. Es que creo que podré disfrutar mejor de los días del futuro con un poco de sacrificio en los del presente. Cosas mías… y sí, ya sé todas las objeciones que puedes poner a eso, no hace falta que me lo digas…
Pero en lo del abrazo estoy de acuerdo, los dos salimos ganando. 😀
Vale… No te lo diré ¿Eh? pero… Te lo pensaré… Y a la cara… 😀 K lo sepas…
>—O—< ¡Muah! ¡Muah! ¡Muah!
Uy… Osito, que me iba y se me olvidaba dejarte un saludito de «hoy», jejejejeje!!!



Mira…
La Luna representa el principio femenino maternal, en un comienzo tuvo una importancia primordial para el hombre, no solo porque su contemplación en el cielo permitió el cálculo del tiempo a través del estudio de sus fases: nueva, creciente, llena y menguante; sino también debido a su relación con la fecundidad de la Tierra, puesto que marcó para los campesinos el momento de siembra y de recolección; coincidente por lo demás con el ciclo menstrual de la mujer de 28 días.

El Sol es el principio masculino vital dador de vida, es la estrella central de nuestro Sistema Solar. Visto desde la Tierra tarda en recorrer la eclíptica alrededor de 365 días.
El Sol representa la conciencia que le da la luz al individuo para que se encuentre a sí mismo, es la esencia, la individualidad, la creatividad, la manera en la cual nos gusta brillar y ser reconocidos; es símbolo de poder, de éxito, gloria. La Luna, en cambio; se asocia con el mundo subconsciente, con la necesidad de nutrir y ser nutridos, con la familia, los niños, lo doméstico, con la imaginación y los sueños, con la manera en la cual expresamos nuestras emociones y sentimientos.
Supongo que sabes que, en la tradición popular, el sol recibía el nombre de Lorenzo, y la luna, Catalina. Decían eso de «Cuando se acuesta Lorenzo, se levanta Catalina».
Abrazos fuertes.
Síiiiiiii!!! Me sé la canción… Mira…
♪♫ El sol se llama ♬Lore, Lorenzo ♪♫ y la Luna, Luna, ♬ Catalina, Lina ♪♫♬
Ven aquí…
>—O—< ¡Muah! ¡Muah! ¡Muah!
Se te ha hecho de noche buscando tu coche en una extraña ciudad, ¡así que como para que te vengan con que se acaba el mundo!, jejeje, ¡problema mayor tengo yo en ese momento, pensarías tú!!!
La lección que saco de tu relato, es que nuestras circunstancias personales priman sobre nuestras reacciones.
¿Si creo en el fin del mundo?
Por supuesto, también debe de extinguirse el sol y previamente absorber la tierra… pero me da que no estaré para presenciarlo.
Desde el cariño, 😉
No hace falta que se agote el sol. Los humanos somos muy capaces de cargarnos todo el planeta mucho más rápido. Y además, echaríamos la culpa a los otros (que son los que la tendrían, claro).
Y esa culpa no la tendrían desde el cariño, los muy [censurado].
Sí, yo creo que reaccioné así porque me sentía culpable de haber perdido otro día sin volver a casa, sin haberlo realmente intentado. Por supuesto, no me creo que el fin del mundo vaya a ocurrir en breve. Si lo pensara, el coche me daría lo mismo, aunque tampoco tengo muy claro qué haría.
Hola y buen medio dia, Alan. Buena entrada. Sobre las religiones, soy prufundamente Atea, pero de las religiones…¿eh? pero.. sobre el fin del mundo, ya se sabe quien lo pronostico, y eso si me lo creo.
Pasa una y muy feliz semana
Saludos
¿Tú crees en la profecía maya? Pero vamos a ver, si lo que ellos predijeron es un cambio, no el fin del mundo…
O eso, o no estoy bien informado… Que lo de la película es eso, una película.
Saludos.
Hola de nuevo. Nostradamus, amigo, Nostradamus, que creo fervientemente en el. Cambios, claro, Alan, ya esta cambiando el mundo, y espero no estar presente….
Otro saludo
Nostradamus sólo es posible interpretarlo ‘a posteriori’, y no es nada concreto en fechas ni datos.
En efecto, los cambios ya los estamos viviendo, y sí, estás presente. Pero no creo que sea tan grave… (eso espero)
Eso espero….yo tambien… en no presenciar lo peor.
Nostradamus no se equivoco en su dia…y menos ahora.
Otro saludo, amigo
…o buscando un…¿qué?
Buen resumen inicial (y conclusiones) acerca de las reflexiones que hicimos en torno a la felicidad y al dilema propuesto.
Te quedarías a gusto con la réplica al señor que compartía tu mesa. Suscribo todo lo que soltaste. Cuando alguien sentencia sin datos, y le pilla a uno en ese puntillo de aturdimiento, sorpresa, desazón, que llevas arrastrando últimamente, al final estallas y pasas a la ofensiva. Aunque luego te plantees lo de las vacaciones y demás…que seguro que algo tiene que ver.
Me gusta cómo sabes trasladar esas emociones a un relato.
Saludos.
… un final para esta entrada. O buscando un tema para la semana que viene. O buscando soluciones para los problemas. O buscando respuestas a las preguntas trascendentales que todos nos hacemos. O buscando respuestas a las preguntas trascendentales que nadie se hace. O buscando la forma de dejar abierta la entrada para no tener que escribir todo esto que ahora me has obligado a poner. O…
Me alegro de que te guste. A mí el señor me dio un poco de pena, pero qué podía hacer después de eso, ¿invitarle a un chupito? Lo mismo lo intento y sale corriendo… La próxima vez, intentaré controlarme.
Saludos.
Buenos días «osito» (ya hay confi jeje) la de años que hace que escuché eso de que se iba a acabar el mundo. Me acuerdo de la fecha exacta fíjate. Era por el año 1984, y aquello que tanto decían en la tele, de que «en el 2000, algo va a ocurrir»…que en el 2000 se iba a acabar el mundo, puff…me sonaba como a algo inédito, glorioso…no sé explicarlo. Y yo no hacía más que pensar…»Mmmm…a ver, entonces en el 2000, yo tendré 24 años!!! Ufff qué mayor!!! 24 años se me figuraban muyyyyy lejanos…mucho. Como si no fueran a llegar nunca sabes? y pensaba que por entonces yo sería ya «vieja» !!!! son de estas cositas que ..no sé por qué razón, se te quedan clavadas ya para siempre ¿te ha pasado alguna vez? a mí muchas…y ésta es una de ellas.

Así es que, lo de acabarse el mundo…puede ser que fuere pero para los científicos como cálculo, mmmm…….van de «culo» jajajja…
Y a este ritmo que llevamos, con el cambio climático y demás, es muy posible ¿cuándo? sepa Dios…pero claro que puede ocurrir (pero que mis ojos no lo vean eh?)
Te dejo un besito de éstos:
Lo del año 2.000 fue la versión tecnológica de lo del año 1.000. ¿Recordáis el efecto 2.000? Decían que no se sabía cómo funcionarían los aparatos electrónicos, porque no guardaban todas las cifras del año, y para muchos sería como si se pusieran a cero. Pronosticaban un montón de electrodomésticos inservibles, y cosas mucho peores (marcapasos, instrumental de quirófanos, ordenadores de control de centrales nucleares…)
Al lado de eso, el diario de mis miedos era una nana… 🙂
Claro, que si con 24 años eras «vieja», ahora ya debes estar «decrépita» (como hay confi 😀 ).
¿De dónde sacas esos niños regordetes? Me está entrando un hambre…
Tampoco creo yo que el fin de mundo esté cerca, aunque algún día, claro, llegará. De momento, nos toca quedarnos aquí, aunque de vez en cuando apetezca apearse un rato. Besos.
Pues sí, «que paren el mundo que me bajo», como dijo Groucho. Tenemos problemas mucho más urgentes que ese del fin del mundo. Nuestro fin en el mundo, sin ir más lejos (es que no me resisto a los juegos de palabras, discúlpame…)
Saludos.
Jajajajaja, pobre hombre le cerraste la boca, quiza lo que el quería decirte es que se acercaba el fin de su tío Mundo, quiza se sentía un poco triste, agobiado y quería compartirlo contigo. Que el pobre Alan extraviado necesitara unas vacaciones después de su travesía por ese extraño lugar, ó quiza un poco de terapia, no sea que empieze a ver o escuchar cosas jajajaja.Creo que también ya me extravie hasta aqui le dejo.
¡Eres genial! Saludos buen-osito. 🙂
Para no dejar de lado el tema, y para curiosidad de algunos … el fin del mundo (de la humanidad pues) nadie sabe ni el día ni la hora, ni alla en el cielo y mucho menos aqui en la tierra, así que no nos dejemos engañar.
Creo que saber la fecha de algo así modificaría el resultado. Si, por ejemplo, faltara mucho para esa fecha, habría menos movimientos de «salvar el planeta», y eso acercaría el final. Si se supiera que será muy pronto, tal vez se tomaran serias medidas, y la fecha lograra posponerse.
¿Estaba malito su tío? No supe entenderlo…
Terapia no creo que me haga falta, pero unos masajitos de relax… no te diría yo que no. 😛
El fin del mundo? bueno, creo que se ha pronosticado muchas veces, pero de ser cierto o no, nadie lo sabe… al menos yo no lo sé 😉
Un saludo!
¿No te enteraste? El mundo se acabó en el año 1.000… Todo esto es sólo la invención de alguien que tampoco se enteró.
Saludos, Flori.
Me encanta eso de que se acerca el fin del mundo y se aleja del principio jajjjajajj…..y todos los demás razonamientos fueron un bombardeo de argumentos que ese pobre señor debe de estar a estas horas aún digiriendo….
Para nada tiene que ver la religión, este mundo nos lo cargamos por menos que vale un peine y nos quedamos tan a gusto…y sin profecías ni na….un loco da un botoncito otro loco da a otro y ale catapumchispum……pero mejor no pensarlo …a saber cuando será..y mientras tú osito sigue escribiendo vale?? que me lo paso genial..jejejej
Besitos con alas para ti….muakkkkk
Yo pienso seguir escribiendo hasta el fin del mundo, o incluso después (dependiendo de si cae en lunes o en jueves 😛 ).
Así que por eso no te preocupes. Y luego, si hay un más allá, seguro que también tienen ‘blogs’, así que también por eso puedes estar tranquila.
Seguro que ahora es un «más allá 2.0».
Pobrecito el señor, la pagaste con él… pero eso te ocurrió a ti??? pensé que era producto de tu imaginación. A mi me hizo gracia la historia, a todos creo que nos ha pasado eso alguna vez, estar en la posición del protagonista (tu) o en la del señor.. y en ambas situaciones después nos debería quedar un rato para reflexionar, o sobre nuestra mala leche y sus causas o sobre qué hay de cierto en la retahíla que nos han soltado. Chau
A mí esa retahíla no se me ocurre de corrido. Escribiendo es más fácil, porque hay tiempo para pensar. Pero me está quedando mala conciencia, creo que me voy a disculpar en el próximo capítulo…
No me ocurrió a mí, se me ocurrió a mí, pero eso viene a ser lo mismo en este universo paralelo…
Saludos.
Por fin conseguí entender que masculla en su cabeza el «Pensador » de Rodin. El pobre tantos años dándole vueltas y más vueltas al fin del mundo. Y el escultor…¡un cabronazo!. Mira que condenarlo a semejante tortura.
No lo pude evitar: el texto enseguida me asoció la obra con el artista. Alan, coge el coche y ve a Paris. Pasea por sus calles y cuando te acerques al Museo Rodin da recuerdos a ese pensador eterno sentado sobre una mole de piedra.
Salud
De acuerdo, cuando vuelva a París, le daré recuerdos de tu parte.
¿Sois buenos amigos? Seguro que sí. 🙂
Saludos.
Y después de la explicación, estoy segura que la cara de asombro todavía le dura.
Chao
Ana
😦 Creo que me pasé un poco. 😦
Él sólo quería hablar de algo durante la cena, pero me pilló… en mal momento.
Alan que divertido. La verdadera felicidad para mi no es sino apreciar cada día y vivirlo del mejor modo posible. No es tan complicado no?. Y el findel mundo… Esperemos que no sea del periodico… Aunque puede que ahora mismo estemos viviendo un fin del mundo que antes conocíamos, me refiero a la ola de cambios en los países musulmanes… Casi tan grande como cuando se termino la guerra fría y cayo el muro… El mundo se ternima y continua. El milagro de la naturaleza… hasta cuando? Un saludo
Estás tocando otros temas que tengo como posibles futuros «mitos revisados», el eterno retorno, el tiempo circular… ¡No te adelantes! 😛
Desde luego, es tiempo de cambios, y hay que saber adaptarse.
Me alegro de que te diviertas. Yo también lo hago.
Saludos.
Bueno Alan, yo creo que si deberias disculparte, este señor tan sólo quería dialogar un poquito contigo y no sabia que tema tocar, sabes lo que es la soledad? pues eso piensa y entenderás…hay veces que con tal de que nos escuchen somos capaces de decir chorradas…
Sí, Carmen, me voy a disculpar al lunes que viene. 😦
vale osito, una cosita sobre el libro que piensas leer, El alienista es muy bueno pero si no has leido Cometas en el Cielo, que como sabes lo puse antes,te aconsejo que lo hagas priemro de verdad! te va a encantar lo digo por lo sensible que eres!
Vale, te haré caso. 🙂
Al terminar de leer, he sentido una pena infinita por el pobre señor que, con toda inocencia, te hizo la pregunta. Vaya rollo que le echaste al infeliz.
Lo importante es que con el texto nos hemos reído imaginando cara cara del susodicho.
Un abrazo
Ya lo sé, Mercedes. No me hagas sentir más culpable aún. 😦
De verdad que el lunes le pido disculpas.
Saludos.
Hola Alan, he estado desaparecido por problemas informáticos, ya estoy aquí otra vez. y veo que has publicado un montón de interesantes relatos. Respecto a éste, confieso que no soy religioso o aunque lo fuere, el fin del mundo nos lo ganamos día a día, poco a poco. Me encantan los juegos de palabras que empleas, me recuerda a esos alocados y magníficos diálogos de las hermanos Marx.
Un abrazo.
Pues sé bienvenido de nuevo. Me extrañaba tu ausencia.
Yo no he hablado de religión. El fin del mundo puede ser completamente físico. Como de costumbre, cada uno que lo interprete a su manera, que es lo más interesante. Me alegro de que te guste mi humor. 😀
Saludos.
Ya sé que no hablabas de religión. La vida es vida y su fin llegará. Lo dicho el humor, la fina ironía, la risa son tan necesarias como escasas y tú me has hecho recordarlo.
Saludos
Buenos días Alan, el texto es inspiración de esta mañana, no es rescatado!! y que importa que yo no sueñe, pero que os invite a soñar, en un día tan precioso como el de hoy?

Buenos días, guapa y triste.
Pues en ese caso, mi sueño es que sueñes tú también. No me puedes impedir soñar eso. Y te aviso, mis sueños se cumplen. Así que tú sabrás lo que haces… 🙂
Saludos.
Pobre hombre, se debió quedar muerto ante tu perorata repentina.
No hay que ser profeta para saber y ver que el fin del mundo se acerca, lento e inexorable, el ser humano se está encargando de ello, y lo está haciendo muy bien!!
Un abrazo.
Muerto no, ni de piedra, como el anterior. Ya os contaré el lunes cómo siguió la cosa. 😀
Saludos.
Buenos días guapetón!! gracias por acordarte de mí, por lo que veo el fin del mundo no ha llegado, venga espero tu post, vale?

feliz jueves!!
¡Qué bonitos los gazapillos! ¡Gracias!
Alan, mucho tiempo sin pasar por tu blog, pero me he cogido vacaciones blogueras! Si toda la gente que predica el fin del mundo estuviera en lo cierto…nos hubieramos muerto un millón de veces cada uno. A mi ni me va ni me viene, soy fatalista, cuando tenga que llegar llegará. De todos modos creo que a mucha gente le encanta la idea…le hace sentirse más viva.
Un abrazo,
Sí te he echado de menos, sobre todo por tu no despedida, pero supuse que volvería a saber de ti.
El fin del mundo es una cosa, y los que lo vaticinan, otra muy distinta. El primero vendrá algún día. De los otros siempre habrá alguno.
Saludos.